¿Qué es IA? – Un poco sobre Inteligencia Artificial.

por Pauli

IA -Inteligencia Artificial- ese término, al igual que “cuántico”, que es agregado a cualquier cosa para volverlo interesante. Desde neveras que dicen tener IA para que aprendas a usarla mejor hasta lavadoras que te ayudan a reducir el tiempo de lavado a la mitad, pasando por los robots, Facebook, algoritmos de reclutamiento con serios problemas contra las mujeres, SIRI, Alexa y Cortana, vehículos autónomos, Uber, IBM Watson, Amazon, YouTube, Netflix… Cuando te detienes un momento a pensar en la cantidad de cosas de nuestra realidad que “tienen” inteligencia, llega a ser abrumador.

Desde que Alan Turing se preguntó en 1950 si una máquina puede pensar la idea de que un aparato sea realmente inteligente le ha quitado el sueño a más de un investigador.

¿Qué es Inteligencia Artificial?

Una definición sencilla sería:

La simulación de procesos de inteligencia humana por parte de una máquina.

Y aunque esa es una buena definición, no nos está diciendo nada realmente, en sí, ¿Qué es la inteligencia?, ya sea humana o artificial.

Facultad de la mente que permite aprender, entender, razonar, tomar decisiones y formarse una idea determinada de la realidad.

Google

IA no es solo “Robotina”

Cuando era pequeña amaba a Los Supersónicos, era de esas caricaturas que jamás me perdía y siempre soñé con poder construir y programar mi propia Robotina (la sirvienta robot de la familia). Creo que entre ese programa y las historias cortas de Isaac Asimov formaron la idea en mi cabeza que IA estaba directamente relacionada con los robots.

La mayor parte de las personas que conozco tienen formada esta idea también. IA es mucho más que un robot, es también reconocimiento de lenguaje natural, visión artificial, algoritmos de búsqueda, sistemas expertos, la mayoría de los tópicos asociados con esto se parecen más a un software corriendo en una máquina que un robot humanoide con la capacidad de amar.

Historia (muy breve) de la IA.

En la mitología griega se dice que Hefesto, dios del fuego y de la forja, creo unas criaturas doradas, dotadas de habla, inteligencia y fuerza. Los alquimistas buscaban trasladar la mente a la materia. En el folclore judío existe el Golem, una criatura creada de arcilla que puede caminar y hablar. Éstos son algunos ejemplos de como desde el inicio de la historia el humano ha pensado en qué pasaría si se le da conciencia/inteligencia/razonamiento a entes sin vida.

Aunque en algunas cronologías sobre la IA se establece los inicios desde la descripción de los silogismos por parte de Aristóteles y en otros se inicia desde la creación de la lógica proposicional por parte de Boole, yo prefiero establecer el verdadero inicio en 1950, ese año Alan Turing escribió el artículo Computing Machinery and Intelligence donde propuso una prueba para determinar si una maquina era o no inteligente.

No fue hasta 1956 cuando se usa el término Inteligencia Artificial en una conferencia en Dartmouth y comienza a darse las previsiones a futuro sobre lo que pasaría cuando las máquinas alcanzaran la inteligencia humana. El gran problema vino un par de décadas después, cuando no se alcanzó lo que se tenía previsto y se llega a lo que se conoce como el Primer Invierno de IA (de 1974 a 1986), donde se abandona tanto el financiamiento como el interés por investigar este campo.

Los grandes problemas a los que se enfrentaron los investigadores durante este periodo incluía:

  • falta de memoria,
  • falta de bases de datos sobre el entorno (ejemplo, palabras para investigación sobre procesamiento de lenguaje natural),
  • expectativas demasiado altas,
  • la paradoja de Moravec (el pensamiento inteligente y racional requiere poca computación mientras que las habilidades sensoriales requieren demasiada capacidad de computo).

Resurgimiento de las investigaciones y los logros del 2000.

En los años 80s comenzó el auge de los Sistemas Expertos, luego en los 90s surgieron los Agentes Inteligentes y luego en los 2000 comenzaron a mejorar los chatbots.

En el 2011, IBM Watson gana el concurso de preguntas y respuestas Jeoppardy!. Finalmente en 2014 una computadora logra pasar el Test de Turing haciéndose pasar por un chico de 13 años.

En la actualidad, el financiamiento (y las investigaciones) están enfocadas en Deep Learning y Big Data debido a las necesidades del mercado.

¿Deberíamos temerle a la IA?

En la universidad un profesor me decía que, ante toda pregunta la respuesta siempre debe ser “depende”, y en este caso. ¿Debemos temerle a la IA? ¿Harán robots asesinos? ¿Hay que regular la IA? y respuesta: Depende.

Para comenzar, no estamos ni cerca de que las máquinas razonen ni siquiera a la par de un ser humano, como lo indica la investigadora Janelle Shane la Inteligencia Artificial disponible en la actualidad se parece más a la capacidad que tienen las lombrices que a un humano, así que por ahora podemos quedarnos tranquilos con el miedo de vendrán máquinas asesinas a borrar a toda la humanidad.

El verdadero peligro, son los datos detrás de la IA, las intensiones de los que programan y entrenan el software que se encargará de “mejorar” cada aspecto de tu vida.

El nuevo gran boom son las redes neuronales y el big data, alimentamos neuronas artificiales con datos históricos para darnos una salida, el problema es que esa data histórica esta plagada de sesgo.

Imaginen que creamos un software para determinar si una persona puede o no robar en una tienda. ¿Cómo le enseñaríamos a la máquina lo que debe buscar? ¿Color de piel? ¿Tipo de ropa? ¿Movimientos y miradas de la persona hacia x o y lugar? ¿Ya se dieron cuenta de lo discriminatorio que suena todo?… Exactamente.

Existe otro punto a considerar, la intuición, los seres humanos tenemos ideas abstractas que no parecen tener un origen definido, pero que nos lleva a conclusiones muchas veces acertadas, lo llamamos intuición. Es el resultado de años de aprendizaje, reconocimiento de patrones y conocimiento no racional.

Entonces, volviendo a la pregunta, ¿Deberíamos temerle a la IA? mi respuesta será con otra pregunta: ¿Deberíamos temerle a los seres humanos? además, ¿Debemos confiar en los datos y la manera que se obtienen en la actualidad?

Los retos.

Una búsqueda en Google nos mostrará toda una serie de artículos escritos por expertos donde se listan y explican los retos que enfrenta la IA. Habitualmente el enfoque se encuentra en los aspectos técnicos y económicos, la infraestructura necesaria, las inversiones, la investigación…

Hay otros puntos que siempre me han parecido interesantes para debatir.

¿Quién gana el dinero?

Automatizar procesos y delegar funciones humanas a máquinas seguirá produciendo ganancias que hasta ahora eran para las personas que trabajaban en un puesto específico, se sustituye a esa persona y la ganancia seguirá generándose ¿A quién le corresponde esa ganancia?

¿Qué pasará con todo el personal no calificado?

Quienes nos metemos de lleno en la tecnología podríamos estar asegurándonos un lugar en el futuro laboral, al fin y al cabo, toda IA debe ser desarrollada, entrenada y testeada, pero ¿Qué pasa con los demás? con esas personas a las que una máquina sustituye. No siempre es fácil cambiar de rumbo laboral, no todos están dispuestos a aprender. Muchos esperan una expansión masiva en los próximos años, pero no siempre piensan en la persona que será sustituida durante esa expansión.

¿Inteligencia para todos o sólo para los ricos?

A medida que se masifique el uso, será menos costoso obviamente, pero las personas/paises que no puedan costearse montar la infraestructura al mismo tiempo se encontraran en una seria desventaja competitiva, al fin y al cabo, quien llega primero siempre es quién escoge mejor.

¿Qué pasa con la privacidad?

La data lo es todo y llegará un cierto punto en el que cada momento de tu día estarás generando información valiosa para alguien. ¿Por qué hoy elegiste comer pollo y no carne? ¿Por qué decidiste ser vegetariano? ¿Qué te hizo hacer click para leer ese titular? Una vez que se pueda correlacionar tus sentimientos, tus palabras y tus acciones, te conviertes en un activo valioso para alguien más. ¿Es ético que sepan todo de ti?

No nada más debe verse desde el cristal del mercantilismo y la publicidad, digo, yo he dicho decenas de veces que me encantaría ponerle a mi abuela a un sensor tipo fitbit y monitorearla en todo momento sin que ella sepa para evitar discusiones, así cuando tenga una alta de tensión arterial sin síntomas yo podría darme cuenta y avisarle de sus pastillas, pero ¿Es mi derecho o deber quebrantar la integridad personal de mi abuela aún cuando yo considere es para su propio bien? No lo creo.

Ya queda para cada persona dibujar la línea de lo que está bien y lo que está mal y, como siempre, llegar a un consenso como sociedad de hasta donde la privacidad es 100% privada.

Fuentes consultadas:

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2 comentarios

Ichinoxx diciembre 11, 2019 - 8:27 pm

Buenardopolis.

Pauli diciembre 11, 2019 - 10:26 pm

De rucula?

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